¿Por qué Pasión4dogs?
Cuando me decidí a lanzarme a trabajar con perros, estuve buscando un nombre comercial que definiese mi sentimiento para con ellos. Quería algo que, al nombrarlo o escribirlo, transmitiese la pasión que siento por ellos, por observarlos, por comprenderlos, por aprender a convivir desde el respeto hacia otra especie... Así nace Pasión4dogs, porque es verdadera pasión la que siento por el mundo canino, por el verdadero mundo canino, no por "enseñarles" comportamientos humanos que al perro no le suponen nada, sino por empatizar con ellos y comprender cómo un perro resolvería determinados problemas de la vida diaria de la forma más sencilla posible. Así que dejé de "enseñar" y empecé a "aprender", a "comprender" la verdadera esencia de lo que es un perro, y cada peludo que pasa por mi vida es un maestro que me enseña algo nuevo.
Llevo ya bastantes años en este mundo, y aún sigo avanzando en él, y seguiré avanzando durante toda mi vida. Cuanto más estudios y formaciones hago, más cuenta me doy de que nos queda muchísimo por aprender y descubrir de esta especie tan maravillosa y apasionante.
En todos estos años he comprendido que los problemas de los perros domésticos empezaron a aflorar cuando había un humano "al otro lado de la correa". Meterlos en ciudades, con tráfico, ruidos, gente con prisas, propietarios con prisas..., y pretender que se adapten "porque sí", o que para gestionar todo esto hagan comportamientos totalmente antinaturales, como mantenerse estáticos en situaciones en los que les es imposible, no comunicarse, no dejarlos oler...
Mi forma de trabajo está basada en el respeto absoluto por el animal y en la comprensión del por qué hace según que cosas, más concretamente, el para qué, y más que buscar el NO HACER, se trata de ahondar en la necesidad del animal para mostrar según qué comportamientos, y así darle herramientas para que o no necesite hacer eso que nos molesta, o que lo haga de otra manera que nos resulte menos problemática, siempre gestionándolo desde la óptica del perro, y no desde el antropocentrismo humano.
Es evidente que perros y humanos tenemos que convivir en los mismos espacios, pero mi búsqueda está encaminada a conseguir perros capaces, que son capaces de resolver situaciones diarias, que sean capaces de pensar por sí mismos, de relacionarse con perros y con personas, de convivir y acompañarnos en esta aventura de la vida, y no perros que obedezcan porque sí, aunque ello les suponga un problema.
¿Por qué Pasión4dogs?
Cuando me decidí a lanzarme a trabajar con perros, estuve buscando un nombre comercial que definiese mi sentimiento para con ellos. Quería algo que, al nombrarlo o escribirlo, transmitiese la pasión que siento por ellos, por observarlos, por comprenderlos, por aprender a convivir desde el respeto hacia otra especie... Así nace Pasión4dogs, porque es verdadera pasión la que siento por el mundo canino, por el verdadero mundo canino, no por "enseñarles" comportamientos humanos que al perro no le suponen nada, sino por empatizar con ellos y comprender cómo un perro resolvería determinados problemas de la vida diaria de la forma más sencilla posible. Así que dejé de "enseñar" y empecé a "aprender", a "comprender" la verdadera esencia de lo que es un perro, y cada peludo que pasa por mi vida es un maestro que me enseña algo nuevo.
Llevo ya bastantes años en este mundo, y aún sigo avanzando en él, y seguiré avanzando durante toda mi vida. Cuanto más estudios y formaciones hago, más cuenta me doy de que nos queda muchísimo por aprender y descubrir de esta especie tan maravillosa y apasionante.
En todos estos años he comprendido que los problemas de los perros domésticos empezaron a aflorar cuando había un humano "al otro lado de la correa". Meterlos en ciudades, con tráfico, ruidos, gente con prisas, propietarios con prisas..., y pretender que se adapten "porque sí", o que para gestionar todo esto hagan comportamientos totalmente antinaturales, como mantenerse estáticos en situaciones en los que les es imposible, no comunicarse, no dejarlos oler...
Mi forma de trabajo está basada en el respeto absoluto por el animal y en la comprensión del por qué hace según que cosas, más concretamente, el para qué, y más que buscar el NO HACER, se trata de ahondar en la necesidad del animal para mostrar según qué comportamientos, y así darle herramientas para que o no necesite hacer eso que nos molesta, o que lo haga de otra manera que nos resulte menos problemática, siempre gestionándolo desde la óptica del perro, y no desde el antropocentrismo humano.
Es evidente que perros y humanos tenemos que convivir en los mismos espacios, pero mi búsqueda está encaminada a conseguir perros capaces, que son capaces de resolver situaciones diarias, que sean capaces de pensar por sí mismos, de relacionarse con perros y con personas, de convivir y acompañarnos en esta aventura de la vida, y no perros que obedezcan porque sí, aunque ello les suponga un problema.
SERVICIOS
ASESORAMIENTO PRESENCIAL Y ONLINE
DINÁMICA DE GRUPOS
.